La eliminación de tatuajes es un proceso delicado, de manera que es muy importante que nos pongamos en manos de profesionales cualificados y con experiencia. En esta ocasión vamos a destacar las ventajas de eliminar un tatuaje con láser, la alternativa más solicitada en la actualidad por sus buenos resultados y bajos riesgos.

Por qué eliminar un tatuaje con láser es la mejor opción

En la actualidad existen diferentes sistemas y técnicas para la eliminación de tatuajes, siendo la alternativa del láser una de las más recomendables por ser menos invasiva y ofrecer mejores resultados y menores molestias.

Cabe destacar que, en este caso, el riesgo de aparición de efectos secundarios se reduce drásticamente, pero eso sí, siempre y cuando el trabajo se ha realizado por un profesional preparado y que utilice el sistema más adecuado en función de las necesidades del cliente.

Sistemas láser de eliminación de tatuajes

Principalmente podemos destacar ocho sistemas láser para la eliminación de tatuajes que son:

• Eliminación de tatuajes con láser de CO2 fraccionado.
• Eliminación de tatuajes con láser de colorante pulsado.
• Eliminación de tatuajes con láser de longitud de onda 1064 nm.
• Eliminación de tatuajes con láser de longitud de onda 532 nm.
• Eliminación de tatuajes con láser de luz pulsada intensa.
• Eliminación de tatuajes con láser fraccionado sublabativo.
• Eliminación de tatuajes con láser Picoway de Syneron Candela.
• Eliminación de tatuajes con láser Q- Switched.

Principales ventajas de eliminar un tatuaje con láser

Vamos a enumerar cuáles son las principales ventajas de eliminar un tatuaje con láser:

• Sistema más eficaz: el láser es la alternativa más eficaz que permite conseguir los mejores resultados reduciendo al mínimo la zona de la piel afectada.
• Más seguro: existen diferentes sistemas láser para la eliminación de tatuajes, los cuales han sido desarrollados exclusivamente para este cometido, gracias a lo cual tenemos la tranquilidad de saber que han sido probados y garantizados en laboratorio.
• Menor dolor: aunque puede causar algunas molestias, al utilizar el láser en lugar de otras alternativas para la eliminación de tatuajes, vamos a reducir sustancialmente el dolor durante el tratamiento.
• Menos cicatrices: en la actualidad disponemos de sistemas láser avanzados que reducen al mínimo el riesgo de aparición de lesiones y cicatrices en la piel durante la sesión de borrado.
• Elimina más colores: este sistema ha sido desarrollado de manera que en la actualidad consigue eliminar tanto los colores oscuros como los colores claros.
• Recuperación más rápida: permite que el cliente pueda recuperar la normalidad en su vida más rápidamente en comparación con otras alternativas como la cirugía.

Qué determina la dificultad para eliminar un tatuaje

Como seguramente ya sabréis, no todos los tatuajes se eliminan con la misma facilidad, sino que existe una serie de particularidades que es importante tener en cuenta para saber si el proceso va a ser más o menos sencillo.

A continuación, vamos a enumerar los principales factores que van a determinar la dificultad a la hora de eliminar un tatuaje con láser:

• Piel del cliente: las pieles más claras van a responder mejor a láser, mientras que las pieles más oscuras se resisten más, además de que también son más propensas a sufrir efectos secundarios.
• Color de la tinta: los colores más oscuros son más fáciles de eliminar, mientras que los tonos claros, entre los que destacan el blanco y el amarillo, pueden llegar a ser bastante complicados.
• Tipo de tinta: hay tintas que presentan una mayor resistencia al borrado como es el caso de las tintas fluorescentes y tintas brillantes.
• Calidad de la tinta: las tintas de peor calidad son más difíciles de borrar que las de buena calidad, lo cual se debe a que generalmente están formuladas con productos que se resisten a la ruptura mediante láser.
• Antigüedad: los tatuajes más antiguos son más fáciles de eliminar, ya que las partículas se habrán dispersado o degradado más en comparación con un tatuaje nuevo.

Localización: hay zonas donde hay una menor vascularización, lo que hace que se precise de más sesiones para la eliminación del tatuaje. Entre ellas destacan los dedos de las manos y de los pies, ya que son zonas donde la circulación sanguínea es más reducida y, por tanto, requiere de más esfuerzo para conseguir hacer desaparecer por completo el tatuaje.